Todo ojo está dirigido hacía las elecciones de los EE.UU para Noviembre, 2016. A pesar de que cada país tiene suficiente polémica en sus elecciones y aun dentro de la iglesia, esta elección atrae un interés internacional. Esto se debe mayormente a las personalidades y acciones dramáticas de los dos candidatos principales.

Antes de seguir, quiero enfatizar que no intento decir por quien debe usted votar. Dejemos este punto para otro autor y otro artículo. En este breve artículo, intento que recordemos algo realmente importante, y es mantenerse firme en una cosmovisión bíblica. Por ende, sólo me dirijo a los cristianos con el propósito de reflexionar al presentar una posición y una voz pública, no solamente durante este próximo mes, sino hasta que vuelva Cristo.

El contexto

Hillary Clinton, ex Secretaria del Estado y esposa del ex Presidente Bill Clinton, es probablemente el candidato más liberal que el país ha experimentado. Ella apoya abiertamente no solamente al “matrimonio” gay, sino que puede ser la persona que meta a la iglesia y otras instituciones religiosas en problemas por no “adaptarse” a su progresismo (que realmente es un progreso hacía la perdición). Ella defiende tanto el aborto que una menor de 13 años si decide provocarse un aborto al 8vo mes de embarazo no tendría ningún inconveniente y a la vez no tendrían ni que avisarle a sus padres por autorización, y el gobierno tendría la responsabilidad de financiarlo.

Donald Trump, empresario y con miles de millones de dólares, y en muchos aspectos ha sido liberal en el pasado, pero ahora, muy probable para ganar apoyo de los republicanos, dice no apoyar el aborto, etc. Es un hombre que siempre se ha jactado de su promiscuidad. Entre muchas otras empresas, es dueño de casinos y salones donde las mujeres bailan desnudas.

Puesto que en Romanos 13, el gobierno es instrumento de Dios para sujetar la maldad, se puede crear el argumento que un cristiano debe votar (aunque no estoy totalmente convencido de esto como imperativo para el cristiano). Y si nosotros, siendo cristianos, votamos, lo debemos hacer con convicciones bíblicas. Considerando esto, quizás debemos tener en cuenta unos puntos antes de tomar una posición pública sobre un candidato.

1. Embajadores de Cristo, Ministros de la Reconciliación

Ahora que, por medio de la sangre de Cristo hemos sido acercados a Dios (Efesios 2:13), nos fue dada una plataforma como embajadores/representantes de Cristo y Su reino (2 Corintios 5:18-20). No creo que debemos tomar la plataforma ante el mundo que el Señor nos dio para proclamar el evangelio y utilizarla para promocionar un candidato. Y aunque algunos cristianos defienden a Trump a pesar de sus perversas fallas expresando que Dios incluso disciplinó a Su pueblo mediante reyes malvados, no debemos apoyarnos con estos ejemplos del Antiguo Testamento. Primero, Dios utilizaba a reyes malvados y no pedía a Su pueblo que los apoyara ni que buscaran solución en ellos, sino que se arrepintieran. Segundo, si vamos a utilizar paralelismo entre Israel (teocracia del primer pacto) y el nuevo pacto, las comparaciones se hacen con Israel y los redimidos en Cristo, y no con una nación como los EEUU.

Algunos cristianos tuvieron buenas intenciones en promover a Trump como el mejor entre dos males, pero lo que no tomaron en cuenta es que el mundo perdido observa esto y varias personas (tanto cristianos como no cristianos) concluyen que este candidato es figura pública para la Iglesia como instrumento para avanzar el reino de Cristo. Aun más, algunos cristianos hablan como si Trump fuera el “ungido” de Dios para hacer a los EEUU “grandioso nuevamente”. Pero, ¿cuándo fue realmente “grandioso” los EEUU? Hubo momentos en la historia cuando la iglesia fue fuerte y misionera, pero el agradecimiento de parte nuestra no es para la nación, sino es con Dios y Su gracia. Debemos reconocer que Dios obró a través de Su Iglesia, y eso fue a pesar de la nación, y no debido a ella. La razón por la cual tantos defienden a un simple hombre es porque ya nos cansamos de la indiferencia hacía el aborto y no queremos que progrese. Y la defensa de esta postura es que no importa lo impío que sea el medio, debemos de evitar que esto siga y que Clinton llegue a la presidencia. Si esa es tu convicción, no soy nadie para decirte lo contrario. ¡Yo aborrezco, yo odio, y desprecio el aborto!…. Y puesto que somos embajadores de Cristo, debemos ver el valor de la vida humana tal como lo vio Jesús al crearnos a Su imagen y semejanza.

2. Si no votas por Trump, no eres cómplice del aborto ni estas en contra de la libertad religiosa.

Existe un problema grave cuando un cristiano dice que si uno elige votar por un candidato de tercer partido o si elige no votar por razones de conciencia y convicción, que esa persona automáticamente apoya a Clinton, o al menos está obrando a su favor.

Un usuario de Facebook, entre muchos, publicó recientemente esto contra el autor cristiano Philip Yancey quien expuso su desdén contra Trump y su confusión por la gran cantidad de apoyo que tiene Trump por parte de los evangélicos: “No conozco la Biblia por la cual vive este hombre [Yancey] pero mi Biblia claramente dice que es pecaminoso el asesinato…” El usuario de Facebook equivale cualquier opinión contra Trump como un apoyo directo a Clinton. Así que la conclusión, según algunos, es que debemos cerrar nuestros ojos y apoyar a todo lo que hace el oponente de Clinton solamente porque es exactamente eso: el oponente de Clinton. ¡Esa clase de pragmatismo es históricamente peligroso!

Otro argumento mayormente dado por los evangélicos para Trump se basa en posibles resultados indirectos de su presidencia. El temor que muchos tienen se debe a que el presidente elige los jueces de la Corte Suprema y debido a las edades avanzadas de algunos jueces actuales, puede que el próximo presidente elija a varios, el cual tiene la posibilidad de cambiar mucho al país, para bien o para mal. Entonces, algunos especulan que Trump pondría unos jueces pro-vida y si un cristiano no vota por Trump, va a ganar Clinton. Y bajo su mandato, ella puede colocar jueces que apoyan radicalmente el aborto, matrimonio gay y oponerse radicalmente a la libertad religiosa, etc. Así que el cristiano que no vota por Trump indirectamente puede estar ayudando al aborto y un ataque contra la libertad religiosa.

¡Este argumento es fuerte! Sin embargo es pragmático y es síntoma de un cristianismo permeado de moralismo cultural.

3. Dios es Soberano

Primero que todo, no podemos olvidar que:

Como canales de agua es el corazón del rey en la mano del Señor;
El lo dirige donde le place. Proverbios 21:1

Yo sé, oh Señor, que no depende del hombre su camino,
ni de quien anda el dirigir sus pasos. Jeremías 10:23

y que:

Todo cuanto el Señor quiere, lo hace,
en los cielos y en la tierra, en los mares y en todos los abismos.

—Salmo 145:6

Por ende, Dios ya eligió el presidente y ningún cristiano será responsable por quien Dios elija. Cada uno de nosotros daremos cuenta por la manera en que seguimos nuestras convicciones bíblicas. Si eso es votar por Trump, ¡adelante! Solo evita, como cristiano, presionar y condenar a otros cuando ellos no justifican los medios que en sus convicciones son malos para un fin supuestamente bueno. Como dijo David Platt, “El hombre es ciertamente responsable en la historia humana, pero Dios es soberano sobre la historia humana.”

Como embajadores de Cristo, el mundo cree que nosotros somos voceros del Reino de Dios, y según la Biblia, de una manera sí somos. Debemos tener mucho cuidado cuando abiertamente promocionamos a un candidato. Lee atentamente lo que sucedió de manera dolorosa y real la semana pasada.

El viernes, 7 de octubre, 2016, salió a la luz una grabación donde Trump hablaba sin vergüenza de cómo a menudo le gusta violar a las mujeres besándolas y poniendo sus manos en sus genitales sin su permiso. Aunque el video tiene 10 años, la ofensa permanece. Varios líderes evangélicos rápidamente le retiraron su apoyo público y pidieron perdón. Esto tomó humildad y nobleza cristiana por parte de estos líderes, el cual es de resaltar. Como seres humanos, todos vamos a errar y debemos ser prontos para arrepentirnos y confesar. Sin embargo es triste ver y escuchar que hay otros líderes y grupos cristianos que abiertamente continúan promocionando su candidatura, con la esperanza de salvar a esta nación “una vez cristiana” de un peor declive moral con Clinton.

4. Existe Solamente Una Nación Cristiana

Tenemos que dejar de engañarnos y entender que los Estados Unidos NUNCA HA SIDO UNA NACION CRISTIANA. ¡No existen naciones cristianas en términos de países! Israel fue una nación escogida de Dios para el primer pacto, y ahora el nuevo y mejor pacto, al que el primero aludía, ha venido y ahora:

…Vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido para posesión de Dios, a fin de que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; pues vosotros en otro tiempo no erais pueblo, pero ahora sois el pueblo de Dios; no habíais recibido misericordia, pero ahora habéis recibido misericordia. (Énfasis agregado)
—1 Pedro 2:9-10

¿A quién se dirige Pedro? A los REDIMIDOS, ¡no a los EEUU! Cuando vuelva Cristo, solo buscará a la novia pura con aceite en su lámpara y todos los demás (cultura judío-cristiana y pagana) serán lanzados al lago de fuego después del Juicio del Gran Trono Blanco (Apocalipsis 20:11-15). No hay ninguna silla en la mesa de las bodas del Cordero para los que aborrecieron Su aceite. ¡La puerta estará cerrada! (Mateo 25:1-13) Aunque hay beneficios de comodidad para el cristiano en un país tradicionalmente judío-cristiano, no existe ningún beneficio salvífico para dicha nación en comparación a una nación pagana porque en ambas solamente nacen pecadores y enemigos de Dios. En una nación, muchos creen ser cristianos por su comportamiento moralista (miembros de una iglesia, diezmo, votan por republicanos, obras de caridad, etc.) y en la otra nación, buscan el mismo hedonismo pero de manera más directa y dentro de las normas de su cosmovisión. Pedro, en Hechos 2, manda a los judíos (no paganos) a arrepentirse y creer en el evangelio. Pablo en Hechos 17 manda a los griegos (paganos) a arrepentirse y creer en el evangelio. ¿Cuál es la diferencia? ¡No habrá en la gloria salvos por cultura!

5. Ningún político, sistema, o filosofía otorga la libertad religiosa.

A pesar de la opinión de muchos, no existe ningún hombre, mujer, cosa, nación, sistema, filosofía, etc., ninguna cosa en los cielos o en la tierra nos quitará lo que ya fue comprado y dado a nosotros los cristianos en y por Cristo: la libertad religiosa.

Y acercándose Jesús, les habló, diciendo: Toda autoridad me ha sido dada en el cielo y en la tierra. Id, pues, y haced discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado; y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.
—Mateo 28:18-20

¿A quién fue dada toda autoridad?: a Cristo. ¿Y quién nos dio el mandato para llevar el evangelio a todas la naciones?: Cristo. Esto significa que la libertad religiosa ya nos fue dada al 100% por Cristo hace dos mil años. La libertad religiosa no es un derecho legislado, otorgado, o quitado por ningún otro que no sea Cristo.

Hace dos años, mi esposa y yo queríamos servir también en nuestra comunidad de habla inglesa y buscamos una iglesia donde servir. Empezamos a asistir a un estudio y el hermano quien dirigía el estudio le pegaba a todo banco de madera mientras caminaba en el lugar y se quejaba con voz alta en contra de los medios y políticos liberales de que las iglesias están perdiendo asistencia, y si no despertamos a la triste realidad que nos asedia, muy pronto seremos una nación pagana con ateos y musulmanes. Luego, cada quien tomaba turnos quejándose de la condición de la iglesia norteamericana y el gobierno. Ya no pude contenerme y alcé la mano, “Hay comunidades a nuestros alrededores que nunca han escuchado el evangelio bíblico y tienen ideas moralistas y culturales de Jesús pero ni siquiera saben quien es Él. Por qué no salimos juntos y predicamos en este pueblo el poder de Dios para la salvación”. De repente…. sólo se escuchaban grillos. El hermano me miró con desdén y rehusó opinar. Todos quedaron callados pero luego empezaron a quejarse y a criticar la cultura nuevamente.

Consideremos lo siguiente: en este momento en los EEUU y en muchos de nuestros países hispanohablantes, no existe ninguna ley que nos prohíbe salir y proclamar el evangelio. Por lo tanto tengamos cuidado de pensar que la libertad religiosa es concedida por los impíos, por favor aprovechemos el tiempo y vamos a darle un buen uso a esta libertad ahora que tenemos aún más oportunidad de hacerlo. Si creemos que un gobierno otorga libertad religiosa pero no evangelizamos, somos hipócritas, y esto lo digo para mi propio detrimento.

Y lo enfatizo nuevamente: el mártir que es decapitado por proclamar el evangelio tiene exactamente la misma libertad religiosa que tienen los ciudadanos de otros países donde se puede compartir legalmente el evangelio. Dicho cristiano proclamó el evangelio libremente bajo el poder soberano de Dios mediante Cristo y el Espíritu Santo durante el tiempo predestinado por la buena voluntad de Dios y después dio su vida de la manera que Dios quiso glorificarse antes de entrar en la gloria y recibir el galardón de su fe.

6. Pon los ojos en Cristo y no en los hombres.

Así dice el Señor:
Maldito el hombre que en el hombre confía,
y hace de la carne su fortaleza,
y del Señor se aparta su corazón.
—Jeremías 17:5

Dejad de considerar al hombre, cuyo soplo de vida está en su nariz;
pues ¿en qué ha de ser él estimado?
—Isaías 2:22

Mi esperanza está en Cristo y solamente en Él. Toda nación será puesta bajo Sus pies, menos la Iglesia, así que sigamos proclamando el evangelio y enseñando la obediencia para presentarle a Cristo una novia pura, blanca y limpia. Nosotros no predicamos la preservación de ropas semi-limpias ignorando corazones no regenerados. Si el resto del mundo ha de ser lanzado al lago de fuego, que entren con ropas iguales de sucias que sus corazones y nuestras conciencias libres de no ser cómplices de su ignorancia (2 Corintios 4:1-6).

El ex ateo Malcolm Muggeridge poéticamente lo expresó de manera contundente para esta generación:
Miramos hacia atrás en la historia y ¿qué es lo que vemos? Imperios que se levantan, imperios que caen [en el olvido]; revoluciones y contrarrevoluciones; riquezas acumuladas y riquezas dilapidadas. Shakespeare ha escrito de la subida y de la caída de los más grandes que, al igual que la marea, suben y bajan con la luna.
He mirado hacia atrás y he visto a mis propios compatriotas [del Reino Unido], que una vez dominaron la cuarta parte del mundo convencidos, la mayoría de ellos, de la popular canción que dice que «El Dios que los hizo poderosos, los hará todavía aún más poderosos».
Oí a un austríaco demente (Hitler) anunciar al mundo el establecimiento de un imperio que duraría mil años. Vi a un payaso italiano (Mussolini) decir que iba a parar y a comenzar el calendario con su ascenso al poder. He escuchado de un asaltador y homicida en el Kremlin (Stalin) de quien la elite intelectual decía que era más sabio que Salomón, más humano que Marco Aurelio y más iluminado que Ashoka.
He visto a América mucho más rica y, en lo que a maquinaria militar se refiere, más poderosa que el resto de los países del mundo juntos; hasta el punto que si los americanos hubiesen querido, hubiesen podido superar a César o a Alejandro Magno en la magnitud y escala de sus conquistas.
Todo [esto] en el transcurso de una sola vida; todo en una sola vida. ¡Todo el viento se lo llevó!
Hoy Inglaterra es parte de una pequeña isla de Europa, amenazada por el desmembramiento [de los nacionalismos] e incluso con la bancarrota. Hitler y Mussolini, muertos, son recordados sólo en la infamia. Stalin, hoy es un nombre prohibido en el régimen que él mismo ayudó a fundar y que dominó por unas tres décadas. América acosada por el miedo de quedarse sin el precioso combustible que mantiene viva la actividad frenética de sus carreteras; envuelta en la polución y con una herida en la memoria por una desastrosa campaña en Vietnam y el escándalo político del Watergate.
Todo en transcurso de una sola vida; todo en una sola vida… ¡todo se ha ido a pique en una sola vida!
[Pero], de entre los escombros de estos superhombres se levanta la gigantesca figura de Uno debido a quien, por quien, en quien y a través de quien solamente el hombre todavía puede obtener la paz [que tanto anhela] – [se trata de] la persona de Jesucristo. Él es el camino, la verdad y la vida, ¿le conoces?


Nota: Las opiniones escritas en este artículo no necesariamente reflejan las del ministerio Respuestas en Génesis.
1. Donald Trump took 5 different positions on abortion in 3 days, accedido el 12 de octubre, 2016.
2. Leer: Bonhoeffer: Pastor, Mártir, Profeta, Espía. No relaciono directamente a ningún candidato con Hitler, sin embargo este libro demuestra el peligro que tiene la iglesia al apoyar a un sistema político por razones pragmáticas.
3. Toda Escritura será citada de la versión La Biblia de las Américas (LBA).
4. David Platt, prédica, Dividne Sovereignty: «The Fuel of Death-Defying Missions», 2012.
5. Sugel Michelén, «Discurso de Malcolm Muggeridge, Digo de Leerse«, accedido el 12 de octubre, 2016.