Nosotros creemos que Dios es omnipresente. La palabra omnipresente (del Latin- omni= todo Dios) quiere decir que Dios no tiene ni tamaño ni dimensiones espaciales. Es más, quiere decir que Dios está en cada punto del espacio con todo Su ser, pero actúa diferente en cada lugar. La Biblia nos dice que Dios creó el mundo (Gen 1:1). Dios es Señor del espacio (esto se lo dijo Moises al pueblo en Deut 10:14).

El profeta Jeremías (23:23-24) dice que de Dios nadie se puede esconder. Dios esta en todos los lugares y llena el cielo y la tierra. El rey David lo expresa bien (Sal 139:7-10). Nosotros no podemos escondernos de Dios. El rey David dice que no puede ir al cielo o al infierno, ni puede ir al mar porque Dios está presente. Pablo también explica que Dios está presente en todo Su ser. También Pablo dice, que en Cristo todas las cosas permanecen (Col 1:17).

Dios no puede ser contenido en el espacio. El rey Salomón dice que ni el cielo puede contener a Dios (1 R 8:27). El profeta Isaias y Pedro afirman lo mismo en Isaías 66:1-2 y Hechos 7:48. Esto nos debe dar ánimo a orar a Dios. También, la idea que Dios es omnipresente nos debe desanimar a pensar que hay algún lugar especial para adorar a Dios que le da a la gente acceso especial a Dios.

Porque Dios está presente, Dios puede castigar, sostener, y bendecir. Nosotros sabemos que Dios está presente en diferentes formas en diferentes lugares. Sabemos que Dios está presente para castigar. El profeta Amós (Amós 9:1-4) explica que la gente no puede escapar el castigo de Dios.

Nos debe dar ánimo que Dios sostiene. El sustento de Dios es que Dios mantiene el universo en existencia y funcionamiento en la forma en que Dios quiere que exista y funcione. Por eso, el Apóstol Pablo dice que Cristo es ante todo y las cosas permanecen en Él (Col 1:17). Es más, el autor de Hebreos (Heb 1:3) indica que Cristo sostiene todas las cosas.

En la Biblia vemos que Dios está presente para bendecir. El Salmista David reconoce que en la presencia de Dios hay plenitud de gozo (Sal 16:11). Dios hizo que Su presencia fuera conocida. Dios actúa en formas especiales para traer bendición y protección a Su pueblo (Ex 25:22; 1 S 4:4).

Cuando Cristo hablaba con la mujer samaritana Dios le dijo que nosotros podemos adorar a Dios en cualquier lugar porque Dios no ha escogido un lugar particular para que le adoremos (Jn 4:20-24). Sin embargo, sabemos que el cielo es el enfoque de la manifestación de Su carácter. El cielo es el lugar de la presencia de Dios. El cielo es el lugar de bendición y gloria. El apóstol Juan tiene una revelación de esto en Ap 21:3.

Nosotros vemos en la Biblia cómo Dios quiere bendecir a Su pueblo (Jn 14:23; Rom 8:9-10; 2 Cor 3:17). Dios quiere bendecirnos al darnos Su presencia. Pero, cuando Dios está ausente, Dios no está presente para bendecir (Is 59:2; Pr 15:29). Esta separación es por el pecado del hombre. Dios no bendice el pecado, mas bien lo castiga.

Debe ser de gran ánimo para los creyentes saber que Dios está presente en todos lados. También, debe ser de desánimo para los pecadores saber que Dios está presente. A los justo les da Su bendición. A los injustos les da castigo.

Soli Deo Gloria


Encargado de la edición Germán Estobar
Fotografía de Sebastian Unrau