Un gran misterio
Uno ve muchas personas fascinadas por lo que se conocen como misterios: asuntos sin…
Bautista Reformado. Esposo de Johanna y papá de Antonia. Pastor de la Iglesia Bautista del Norte (Bogotá, Colombia). Director Editorial de Esclavos de Cristo.
Uno ve muchas personas fascinadas por lo que se conocen como misterios: asuntos sin…
Hay una frase famosa que se repite una y otra vez: Gracias a la vida porque (insert…
Dios, a lo largo de las Escrituras, muestra una y otra vez su soberanía sobre todo lo que ocurre. Pero Él no está viendo una película y tomando decisiones en consecuencia: lo ha decretado todo, incluyendo la salvación de sus hijos.
Si un niño de 10 años dice que se cree un hombre de 40, ni la ley ni la sociedad lo tomaría como tal. Pero si un hombre dice que es mujer, el mundo corrupto corre a aplaudirlo. ¿Ve usted el problema?
La vida cristiana no es sencilla. Ese falso evangelio que promete tu mejor vida ahora, una existencia llena de deleites, sin dolor o dificultades niega que nuestra mejor vida viene después.
Uno de los argumentos que escuchamos con mayor frecuencia es que la mujer es dueña de su cuerpo, es decir, que puede decidir sobre él. El problema con esto es que, precisamente, el bebé que crece en su vientre <em>no es su cuerpo</em>.
han hecho todo lo que se supone que debe hacer un cristiano, pero Dios no los sana. ¿Por qué?
Lamentablemente, estanterías como las que describí hace un momento no son la excepción, sino la regla, en cuanto a muchas librerías que se autodenominan cristianas.
Se desgastan con obras teatrales, bailes, cantos que producen algo así como un éxtasis, luces, humo y muchas cosas más... Pero ¿y la Palabra? ¿Dónde está la Biblia? ¿En las anécdotas que cuenta el líder desde el púlpito? ¿En las bendiciones materiales que (dicen) Dios les dará si se arrepiente?